Es un edificio de gran tamaño construido en estilo neoclásico según el diseño del arquitecto Aníbal González. Fue el último de los pabellones de la plaza de América en terminarse, año 1919. Durante la Exposición Iberoamericana de 1929 fue el pabellón de las Bellas Artes. Actualmente acoge el museo Arqueológico de Sevilla.